Justo antes de salir a tomar el colectivo encuentro en la biblioteca de casa un librito rosa que dice: Osvaldo Soriano.
Perfecto. Lo voy a leer.
En el viaje en tren me regodeo en la genialidad de las "llamadas internacionales" que escribía durante los '90. Por otro lado, me deprime leer una tras otra las atroces leyes y medidas que se tomaban durante esa época. No es que las desconociera. Pero me refresca un poco la mente.
Totalmente antipopulares, esas decisiones de gobierno fueron las que destruyeron casi todo en este país.
Perfecto. Lo voy a leer.
En el viaje en tren me regodeo en la genialidad de las "llamadas internacionales" que escribía durante los '90. Por otro lado, me deprime leer una tras otra las atroces leyes y medidas que se tomaban durante esa época. No es que las desconociera. Pero me refresca un poco la mente.
Totalmente antipopulares, esas decisiones de gobierno fueron las que destruyeron casi todo en este país.
Luego, vuelvo a mi actualidad. Una nueva ley de medios de radiodifusión (servicios audiovisuales es más específico en la actualidad, pero dejémoslo ahí) está muy cerca. Casi la podemos sentir.
Pienso en la diferencia entre ambas realidades.
Y me alegro de que los que protestan ahora sean los grandes monopolios. O ni siquiera protesten, ya que "ignoran" la noticia del apoyo que está recibiendo el proyecto. Parecen más interesados en mostrar el casamiento de un futbolista. Son los primeros que se llenan la boca defendiendo lo que ellos entienden por libertad de expresión. Cuando también son los primeros en coartarla teniendo todos los medios que pueden tener en su poder.
Vaciaron de contenidos plurales y de voces nuestros medios audiovisuales. Si hoy están ofuscados vamos por buen camino.
Pienso en la diferencia entre ambas realidades.
Y me alegro de que los que protestan ahora sean los grandes monopolios. O ni siquiera protesten, ya que "ignoran" la noticia del apoyo que está recibiendo el proyecto. Parecen más interesados en mostrar el casamiento de un futbolista. Son los primeros que se llenan la boca defendiendo lo que ellos entienden por libertad de expresión. Cuando también son los primeros en coartarla teniendo todos los medios que pueden tener en su poder.
Vaciaron de contenidos plurales y de voces nuestros medios audiovisuales. Si hoy están ofuscados vamos por buen camino.